Cuando la aspiradora se rompe y deja de aspirar, nunca llegaríamos a pensar que es un problema de internet... pero curiosa época nos ha tocado vivir.
Conectamos nuestra aspiradora, nuestros interruptores eléctricos, el timbre de la entrada y nuestros aires acondicionados a internet. Las cosas ahora están conectadas a internet - es el IoT.
Desde nuestra propia nevera, a la tele, las persianas, o los dispositivos de placer (mira el enlace si te sorprende) para poderlos controlar en remoto desde nuestros móviles, con una bonita APP.
Técnicamente debe haber un Servidor (un ordenador) encendido 24h para comunicar tu móvil, con el dispositivo. Siempre hay un intermediario, y es gracias a ello que funcionan, y también es como la empresa, obtiene datos (telemetría) del uso que le das al dispositivo y qué nuevas funciones puede implementar (tal como hablamos en el post de telemetría).
Es una buena idea, y bien ejecutada, nos facilita la vida.
Pero cuando este dispositivo depende tanto de internet que sin la APP no funciona porque, por ejemplo, no trae mando a distancia, o una interfaz, estás completamente a merced de tu conexión a internet para que el dispositivo de tu propiedad, te funcione.
¿Y si la empresa quebrara y apagara estos ordenadores? te quedarías con un dispositivo que tampoco podrías usar.
Este es el caso de:
Por un problema en los servidores de amazon, el timbre de la puerta de tu casa deja de funcionar, y la aspiradora de limpiar tu casa...
No es el hecho de que un servicio pueda fallar, puesto que es normal, aunque estemos hablando de Amazon, Google, o cualquier servicio, el hecho, es que a parte de la privacidad y riesgos de seguridad a los que nos exponemos.
Sino es el hecho que lo que compramos, no es realmente nuestro.